Así pues me dispuse a participar en el maravilloso proyecto baloncestístico de los "Show Time", en fin parece ser que había que dar un nombre, y a Juanjo no se le ocurrió otro nombre... ya que se nos denegó ser los "testículos de Jehová". Gente sin humor.
El equipo lo componemos 10 jugadores. Habíamos quedado para jugar unas cuantas pachanguitas, y la verdad es que no parecía mal equipo. El equipo es en líneas generales: bajito pero con un tiro exterior relativamente potente.
De esta guisa, nos presentamos el domingo a las 12.30 en los campos situados en los aledaños de la plaza de Perú. Fuimos 6 a jugar con la inconmensurable y ruidosa afición que arrastramos en cada partido (Nacho lesionado, el padre de Javi y Ángela).
Pues bien contra todo pronóstico, empezamos el partido bastante entonados, con un parcial de 9-2 en poco más de 5 minutos. Dos de dos en triples, una canasta bajo el aro, un tiro libre y una buena defensa en zona.
La alegría nos duró poco, ya que cada minuto con tan poco banquillo las piernas nos iban pesando, mientras el equipo contrario remontaba cada vez más puntos hasta ponernos 13-17 perdiendo en la primera mitad. Resultado que fue paulatinamente aumentando hasta llegar al final del partido con un 24-37 en contra.
Mis estadísticas fueron, como no podía ser de otra forma, las lógicas para un aguerrido ala-pívot de metro ocheta y siete: 3 puntos, nueve rebotes, un tapón y 5 faltas personales… expulsado (aunque los árbitros me pusieron una de más al equivocarse al apuntar las faltas) y lesionando a un contrario (involuntariamente, no me gusta el juego sucio). Lo único que fallaron fueron los tiros libres 1/4.
La verdad es que no estuvo nada mal. Sobretodo por competir en algún deporte tras probarme en esgrima, fútbol y futsal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario